abril 17, 2012
Reforma
Además de diferenciarse en sus propuestas políticas, los candidatos a la Presidencia también se distinguen en su manera de volar.
Mientras que el priista Enrique Peña Nieto tiene a su disposición toda una flota de aviones y helicópteros particulares que renta para recorrer el País durante la campaña, la panista Josefina Vázquez Mota contrató horas de vuelo en un par de jets.
En tanto, el perredista Andrés Manuel López Obrador viaja en aerolíneas comerciales y hasta le toca hacer fila en los filtros de seguridad y las salas de espera como cualquier otro viajero.
Para viajes largos, el abanderado tricolor emplea un jet Bombardier Challenger, matrícula “XA-OHS”, y otro Dassault Falcon 50, matrícula “XA-PRR”. Los costos estimados de arrendamiento de esas aeronaves son de 3 mil 500 dólares la hora.
En 18 días de campaña por la Presidencia de México, Peña Nieto ha viajado a 11 destinos con tres horas diarias de vuelo, en promedio.
En trayectos cortos o para acudir a reuniones en la Ciudad de México, el abanderado presidencial tricolor utiliza cuatro diferentes helicópteros, entre ellos un Agusta matrícula “XA-UPD”. Los costos estimados de arrendamiento por hora de vuelo son de 3 mil 800 dólares.
Además utiliza aviones Boeing 737 para el equipo de avanzada que organiza los mítines, entre los cuales están las aeronaves con matrículas “XA-UMQ” y “XA-UHZ”; el primero fue utilizado para el acto de arranque de campaña en Guadalajara y el otro fue empleado la semana pasada para trasladar a decenas de colaboradores a Oaxaca. El costo estimado en esos aviones es de 10 mil dólares por hora.
Peña Nieto contrata los servicios aéreos con la empresa Eolo Plus del Grupo HIGA, propiedad de Juan Armando Hinojosa Cantú, un empresario del Estado de México que ha ganado la construcción de varias obras en la entidad, entre las que destaca el Hospital Regional de Alta Especialidad de Zumpango.
La empresa Eolo Plus es un operador de base fija (FBO, por sus siglas en inglés) con sede en Toluca, y fue creada en 2006.
El helicóptero “XA-UPD”, de 8 plazas, que renta esa compañía, desató una polémica durante la última elección en el Estado de México, pues fue utilizado por Eruviel Ávila para sus recorridos de campaña como candidato del PRI en esa entidad.
Otra de las aeronaves que opera esa empresa es el jet privado con matrícula “XA-OHS”, en el que el candidato, acompañado de su esposa Angélica Rivera, acudió a Hermosillo, Sonora; durante la visita por esa ciudad se dio a conocer la creación del grupo “Las Gaviotas”, que ofrece 12 mil votos para el priista.
“La satisfacción, el lujo y la comodidad son premisas que en Eolo Plus (razón social) nos permitimos llevar a la altura de tus demandas y gustos. Buscando siempre el balance entre seguridad y eficiencia, tanto como el de buen gusto y atención por nuestros clientes”, ofrece la empresa en su página de internet.
Las aeronaves de Eolo Plus han sido puestas al servicio de Peña Nieto desde su cargo como Gobernador, entre 2005 y 2011, a pesar de que el Gobierno del Estado de México cuenta con su propia flotilla.
Otros proveedores de servicios aéreos del abanderado presidencial tricolor son las compañías Aerolíneas Sol y Global Air.
Mientras tanto, Vázquez Mota usa para su actividades proselitistas por todo el País un Learjet 45 que alquila a la empresa “Programa Millas”.
De acuerdo con voceros del equipo de campaña de la panista, la abanderada cuenta con un contrato de arrendamiento de esa aeronave por 200 horas, con un costo promedio de mil 550 dólares por hora.
Ese convenio le permite hacer uso de un jet privado con capacidad para 8 ocupantes dependiendo de las necesidades de sus giras, mientras que el resto de sus colaboradores viajan en avión comercial.
En precampaña, la panista voló a Perú y Argentina en un avión propiedad de Cemex, aunque miembros del equipo de campaña de la panista señalaron entonces que el uso de esa aeronave era parte del “Programa Millas”, mediante el cual se dispone de una flota de aviones privados de empresarios que no son usados por ellos cotidianamente.
De esa forma, cuando la panista solicita a la empresa un avión debe especificar características e itinerarios, y ésta ofrece el que esté disponible.
Cuando la candidata viajó a Sudamérica, voceros de Vázquez Mota aclararon que no había recibido un apoyo específico de Cemex.
“Esa empresa (Programa Millas) revisa su lista y dice, si mañana está listo el de Coca-Cola, por ejemplo, entonces mandan el avión de Coca-Cola y es el que usamos mañana, no porque haya un acuerdo entre Coca-Cola y la campaña. Ese día tocó Cemex, es el que habría estado habilitado”, indicó un vocero.
Vázquez Mota viajó a Sudamérica en el jet Falcon 2000EX, matrícula XA-CMM. La empresa Aviación Comercial de América es propietaria formal del jet. Dicha empresa aérea, cuyo gerente es Roberto Zambrano Villarreal, depende de Cemex.
Sin embargo, el uso de jets privados y helicópteros por parte de Vázquez Mota viene desde sus tiempos como precandidata y de semanas antes de iniciar campaña.
Por ejemplo, REFORMA detectó que la precandidata panista viajó el 26 de enero a Tamaulipas a bordo de un jet privado, matrícula XA-UPR, el cual aterrizó en el aeropuerto Francisco Javier Mina, ubicado en la colonia Aeropuerto, de la ciudad de Tampico. Más tarde, asistió a la ciudad de Reynosa.
El 16 de marzo, la candidata presidencial panista empleó un helicóptero para trasladarse a un encuentro con estudiantes del Tec de Monterrey, campus Edomex, ubicado en Atizapán de Zaragoza.
Ese viaje en el Agusta, matrícula XA-ALE, se registró la misma semana en que tomó protesta en el Estadio Azul, en la que ironizó por su paso en el ITAM y recordó su tesina sobre la UNAM.
Ya en campaña también ha realizado traslados en helicóptero, como el que llevó a cabo el 2 de abril, para poder asistir al foro convocado por la Fundación México S.O.S, luego de una gira por Huejutla, Hidalgo.
Usa AMLO vuelos comerciales
López Obrador viaja en vuelos comerciales y hacer traslados terrestres en camionetas durante su campaña por la Presidencia.
Al menos cuatro días a la semana se le puede ver en las salas de espera del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, donde la gente se le acerca para pedirle una fotografía o un autógrafo.
Cuando el abanderado llega a la terminal aérea, su equipo ya documentó su equipaje y tiene listo su pase de abordar.
El tabasqueño debe pasar el filtro como cualquier ciudadano, depositar sus cosas en charolas, pasar los arcos de seguridad y ser revisado por los elementos de seguridad.
Al llegar a su destino, ya lo esperan en los aeropuertos locales sus dos camionetas Suburban blancas; luego de que sus colaboradores viajaron durante la noche o el día anterior para llegar a tiempo a recogerlo.
El abanderado siempre viaja en avión con su coordinador de logística, Nicolás Mollinedo, quien es el único autorizado para manejar la camioneta donde viaja de copiloto; sólo en eventuales ocasiones es sustituido por otro chofer, Alberto Rojas.
Cuando sus camionetas no alcanzan a llegar, líderes locales prestan sus vehículos, que son conducidos por Mollinedo, y en donde es acompañado por su coordinador de prensa, César Yáñez, y su hijo José Ramón López.
En sus mítines de campaña, es común escuchar al tabasqueño criticar a sus adversarios, principalmente al priista Enrique Peña Nieto, por viajar en helicóptero, y aclara que él es un político hecho a ras de tierra.
Durante la precampaña, López Obrador recorrió entre 260 y 600 kilómetros al día por carretera y permanecía en cada estado alrededor de tres días. Sin embargo, en la campaña que arrancó el 30 de marzo, todos los días regresa a la Ciudad de México y visita dos puntos, los cuales, muchas veces están lejos de la ciudad, a 130 kilómetros de distancia, en promedio.
Antes del iniciar la campaña, el candidato rechazó la propuesta de sus colaboradores que le sugerían rentar aviones.
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