Proceso - 2011
Ernesto Cordero, la construcción mediática de una candidatura
Jenaro Villamil
MÉXICO, D.F., 13 de junio (apro).- Las polémicas generadas por el titular de Hacienda, Ernesto Cordero, no son casuales. No es el salario ni el desarrollo económico; ni el nivel de ingreso ni tener un debate con Enrique Peña Nieto lo que le preocupa a Cordero, sino ser mencionado con tanta insistencia, aparecer en los medios para ser identificado en una contienda por la candidatura del 2012, a la cual llega con retraso y muchos pasivos.
Del 27 de mayo al 2 de junio pasado –fechas de mayor número de intervenciones públicas de Cordero--, se logró el objetivo: de acuerdo con el monitoreo de la empresa Intelicast, Cordero encabezó el posicionamiento mediático con 2 mil 837 menciones, de las cuales, el tema de la elección presidencial y su “destape” fue el más reportado (mil 941), frente a 486 notas relacionadas con política económica y sólo 86 sobre desarrollo económico.
Cordero desplazó claramente al mexiquense Enrique Peña Nieto, el puntero de la carrera presidencial. El gobernador mexiquense tuvo, en el mismo periodo, 847 menciones, de las cuales 174 fueron sobre el tema “elección presidencial”, 92 sobre la presunta “guerra sucia” en su contra y 75 sobre el tema de las campañas electorales. Peña Nieto quedó en tercer lugar.
En segundo lugar, por número de menciones, se ubicó el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Marcelo Ebrard, con mil 328, de las cuales, 186 fueron sobre el tema “elección presidencial”, 185 sobre “seguridad pública” y 100 notas sobre actos protocolarios, relacionados con su papel como jefe de Gobierno.
La operación a favor de Cordero se orientó hacia los medios electrónicos. El mismo monitoreo, registró que 61% de las menciones fueron en las estaciones de radio y 9% en televisión, especialmente en cinco programas: Coordenadas, El Mañanero, Informativo 40, Matutino Exprés, Debatitlán. El 26%, de los periódicos; 4%, de internet, y menos de 1%, en revistas.
Con mucho, el periódico que mayor número de menciones le hizo, 90% positivas, fue Nuevo Excélsior, con 59, seguido de El Universal, con 45, 30 de ellas positivas; Milenio Diario, con 40, 29 de ellas positivas, y Reforma, con 36 menciones, de las cuales 27 son positivas, según la clasificación de Intelicast.
Esta estrategia es explicable. Siendo el miembro del gabinete con menor índice de reconocimiento entre la población general y el precandidato panista que apenas es conocido por 20% de encuestados (según Buendía &Laredo), sus nuevos asesores, entre los que se encuentran el estadunidense Dick Morris (uno de los artífices de la guerra sucia contra López Obrador en el 2006), le han indicado que privilegie los medios electrónicos que tienen mayor exposición y alcance nacional.
Las notas en las estaciones de radio prácticamente han sido gacetillas a su favor. De las mil 235 menciones contabilizadas, 879 son positivas y sólo 356 negativas. Los que más menciones hicieron de Cordero durante este periodo fueron: Los Tiempos de la Radio (144), Radio Fórmula (141), Hoy por Hoy (105), Eduardo Ruiz Healy (84). Este último conductor es el único caso de mayor número de menciones negativas: 48 frente a 36 positivas, de acuerdo con el monitoreo.
Lejano posicionamientoLa pregunta es si esta estrategia de mayor número de menciones, le ayudará a Ernesto Cordero remontar sus bajos índices de preferencia.
Intelcast hace el siguiente recuento:
a) Parametría, en su reciente encuesta con la pregunta ¿Por cuál de los siguientes candidatos votaría usted? Arroja el siguiente resultado sólo en relación con los precandidatos del PAN.
-A población abierta, Santiago Creel tiene 25%, seguido de lejos por Josefina Vázquez Mota, con 9%; Alonso Lujambio, con 5%, mismo porcentaje de Gustavo Madero. Ernesto Cordero tiene sólo 1%
-Las cifras no mejoran entre simpatizantes y votantes panistas. Tiene el mismo 1%, frente al 50% de Santiago Creel, 10% de Josefina Vázquez Mota, 6% de Gustavo Madero y 3% de Alonso Lujambio.
b) El Universal, en su encuesta de mayo de 2011, le dio a Ernesto Cordero 2% de las preferencias a población general y 5% entre panistas. Creel tuvo 23% entre la población general y 35% entre militantes de Acción Nacional. Josefina Vázquez Mota registró 14% y 15% entre población general y panistas, respectivamente.
Alonso Lujambio apareció con 4 y 5%, respectivamente.
c) Mitofsky confirmó en febrero pasado el desconocimiento que tiene la gente de Ernesto Cordero. A la pregunta: ¿Quién le gustaría que fuera el próximo presidente de México? El 32.7% mencionó a Enrique Peña Nieto; el 8.7%, a Andrés Manuel López Obrador; 4.3%, a Santiago Creel; 3%, a Marcelo Ebrard; 1.7%, a Josefina Vázquez Mota; y 1.4%, a Manlio Fabio Beltrones. Sólo 1.1% mencionó a Ernesto Cordero. En noviembre de 2010, Cordero ni siquiera apareció en esta encuesta.
Entre panistas, según Mitofsky, Cordero está en un lejano tercer lugar con 4% de preferencias, frente al 25.7% de Santiago Creel; 11.1% de Josefina Vázquez MotaM; y 5.2% de Alonso Lujambio. La medición fue de febrero.
Frente a estos indicadores demoscópicos, es explicable por qué Cordero, en las últimas tres semanas, ha ocupado la agenda mediática de la sucesión presidencial y de las polémicas con sus desafortunadas declaraciones –perfectamente calculadas para generar reacciones que le den exposición mediática--, y con la insistencia de comentaristas radiofónicos en colocarlo en la agenda sucesoria frente a Enrique Peña Nieto y Marcelo Ebrard.
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