PRD: 2010 será recordado por violencia

PRD: 2010 será recordado por violencia - Yahoo! México Noticias

MÉXICO, D.F., diciembre 30 (EL UNIVERSAL).- La dirigencia nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD) mantuvo firme su rechazo a las políticas en materia de combate a la inseguridad, el crimen organizado y el narcotráfico implementadas por el gobierno del presidente Felipe Calderón.

Hortensia Aragón, secretaria general del partido del sol azteca, subrayó que 2010 será recordado por los mexicanos como el año con el mayor número de asesinatos derivados de la violencia relacionada con las diferentes actividades en las que se ha diversificado el crimen organizado en el país.

"Para 2011 es seguro que el narcotráfico continúe fortaleciéndose y la violencia se siga recrudeciendo mientras el gobierno federal insista en privilegiar los golpes mediáticos que representan la captura de los supuestos líderes de 'casi todos' los cárteles mexicanos que operan ya a nivel internacional", advirtió.

Consideró que la actuación de los grupos criminales va encaminada al paulatino fortalecimiento de su presencia en la frontera sur de Estados Unidos y en una incesante penetración en los países de Centroamérica, en donde ya se han revelado como factor de desestabilidad política y social en Guatemala, El Salvador y Costa Rica.

Sostuvo que seguirá creciendo el narco mientras no se decida a atacar las redes financieras y el "lavado" de dinero que le dan sustento y viabilidad al entramado económico de los cárteles, que permite -dijo- su participación en 22 de 23 actividades ilícitas consideradas por la ONU como propias de la delincuencia organizada, que representan a su vez ganancias por 25 mil millones de dólares anuales.

"Desde los primeros meses del año quedó de manifiesto que el escalamiento de la violencia, sobre todo contra ciudadanos comunes y corrientes ajenos a las operaciones de los cárteles de la droga, sería la forma en que las bandas de narcotraficantes se manifestarían con tal de no perder sus cotos de poder".

Señaló que la Procuraduría General de la República reconoció recientemente más de 30 mil asesinatos que ha arrojado la estrategia federal en cuatro años de gobierno, que representa la mitad de los muertos oficialmente reconocidos por el gobierno de Estados Unidos por su intervención militar en Irak.

Aragón Castillo sostuvo que la actuación de los grupos criminales ocasionó que las ciudades fronterizas de Nuevo León, Chihuahua y Tamaulipas se convirtieran a lo largo de este año en escenario de cruentas batallas entre cárteles rivales.

Indicó que las principales víctimas en esas batallas fueron miles de jóvenes enganchados "a la boyante industria del narcotráfico, ante la falta de empleos para satisfacer sus necesidades básicas y las de su familia y a causa de la cancelación de oportunidades para hombres y mujeres que desean continuar sus estudios y construirse un futuro alejados de la violencia".

Hizo notar a Chihuahua, como la entidad con el mayor número de asesinatos registrados en todo el territorio nacional en 2010.

Recordó: "La masacre de 17 jóvenes en una fiesta en Villas de Salvárcar, a principios de año, fue el primero de muchos casos en los que el ajusticiamiento de cuentas entre bandas rivales fue el común denominador, pero en el que desgraciadamente la mayoría de las víctimas eran ajenas a las mismas.

"Misma suerte corrieron cientos de adolescentes y personas menores a 30 años que utilizaron los centros de rehabilitación contra adicciones instalados en Ciudad Juárez como refugios para tratar de evadir la venganza de los brazos armados de los cárteles de los que han tratado de alejarse".

La gravedad de la violencia en México durante 2010 -agregó Aragón Castillo- se manifestó también en bombazos, granadazos, entallamiento de vehículos, narcobloqueos y vendettas y no fue ajena para la clase política de nuestro país.

La dirigente partidista subrayó que varios candidatos a diferentes puestos de elección popular e incluso presidentes municipales en funciones de diferentes partidos fueron ultimados por venganzas y ajustes de cuentas de grupos criminales, la mayoría por no acceder a las peticiones de estos o no permitirles operar con libertad en sus municipios.

Sostuvo que esos crímenes elevaron el repudio y la indignación de la ciudadanía y motivaron que la clase política del país exigiera al presidente de la República dar un golpe de timón en la forma en que ha asumido la lucha contra el crimen organizado.

Dijo que la realización de los Diálogos por la Seguridad, "parecía un intento genuino por tomar las opiniones y los puntos de vista de toda la sociedad, pero sobre todo de los personajes encargados de tomar las decisiones en nuestro país".

Lamentó que este ejercicio haya terminado "en una charada de buenos deseos en la que prevaleció la terquedad presidencial y la falta de voluntad del gobierno calderonista para cambiar en serio la situación prevaleciente", indicó la perredista.