Malgasta la SEP fondos educativos
Publicado: sábado 10 julio 2010
Por: /AGENCIA REFORMA
Ciudad de México
La Secretaría de Educación Pública (SEP) le ha puesto cada vez más dinero al gasto educativo sin importar que no se tengan resultados acordes con la inversión.
Según datos de la Secretaría de Hacienda, mientras el número de maestros pasó de 857 mil en 1998 a 945 mil en 2009, lo que representa un crecimiento de 10 por ciento, el dinero destinado por el Gobierno al Fondo de Aportación para la Educación Básica y Normal (FAEB) creció 52 por ciento en términos reales en el mismo lapso.
Es decir, el monto asignado pasó de 171 mil 895 millones de pesos a 261 mil 868 millones al cierre de 2009 (descontando el efecto de la inflación).
El FAEB, creado en 1992, son recursos que la Federación transfiere a los estados, el Distrito Federal, y los municipios. Su objetivo es impulsar la educación básica en los estados a través de la generación de programas específicos y de capacitación.
Sin embargo, el 80 por ciento del dinero se va al pago de sueldos y prestaciones del magisterio, alertó Marco Cancino, investigador del Centro de Investigación para el Desarrollo en México (CIDAC).
El FAEB, dijo, es el mejor ejemplo de cómo se desperdician los recursos gubernamentales porque no hay control sobre quién y cómo lo gasta.
"Este fondo es un buen ejemplo de cómo el crecimiento del gasto no garantiza la calidad del gasto, pero el Gobierno federal no ha puesto límites a la demanda de recursos por esa vía", advirtió Cancino.
De acuerdo con expertos, las pruebas de ENLACE evidencian que el incremento de los recursos no ha sacado a los estudiantes de la mediocridad.
Más del 60 por ciento de los alumnos de educación primaria mostraron en 2009 un nivel insuficiente o elemental en sus conocimientos de español y matemáticas.
Juan Pardinas, director del área de Finanzas Públicas del Instituto Mexicano de la Competitividad (Imco) criticó que se destine más dinero a una infraestructura educativa que no crece y señaló al fondo como uno de los que tienen mayor opacidad en su manejo.
También la Auditoría Superior de la Federación ha advertido sobre su mal uso.
Por ejemplo, ha detectado pagos a 6 mil 360 trabajadores con plaza, pero no ubicables; transferencias a cuentas estatales por 844 millones de pesos y compensaciones discrecionales por 609 millones.
/rpj
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