ROSAURA BARAHONA
Ayer, al revisar EL NORTE veo en la sección Empresas una página completa con una foto de Alfonso Romo, Andrés Manuel López Obrador y Fernando Turner, bajo el letrero de Despierta México. Lo confieso: puse cara de "whaaaat?". Antes de leer el texto, las dudas empezaron a inundar mi cabeza: ¿Qué no fue Romo quien apoyó a Fox, con todo lo apoyable, y quien tenía la certeza de que Fox cambiaría las cosas en este país? El discurso de AMLO se ha mantenido igual desde su candidatura. Quizá lo haya suavizado un poco, pero lo esencial ahí está. ¿Por qué, de repente, algunos empresarios descubren que el tabasqueño no estaba equivocado y apuestan no sólo por su triunfo como Presidente, sino como única alternativa para sacar al País de este hoyo sin fin? No sé si los empresarios interesados en apoyar a AMLO escuchen pasos amenazantes para sus fortunas, pero deben aceptar que estas dudas, planteadas por quienes estamos fuera de la jugada, son explicables y honestas. Si Romo siempre ha representado a la derecha más recalcitrante de México, ¿por qué ahora se inclina por la izquierda y la ve como la única opción para sacar al País adelante? Sus bandazos, repentinos y radicales, dejan una sensación de frivolidad, más que de seriedad política. Sin embargo, la posibilidad de que algunos empresarios se abran a otra opción, nos alegra. Despierta México va en serio, me aseguran muchos, pero no es fácil creerlo. El PRD está a favor del aborto permitido por la ley y del matrimonio entre personas del mismo sexo. Romo organizó aquí un numerito en contra del Congreso cuando se iba a aprobar la ley que permite abortar en ciertas circunstancias. Maca, su esposa, jamás aceptaría negociar esas cosas con los perredistas... ni permitiría a Poncho hacerlo. Y como eso, habrá otras cosas.
Monitor Político, 111013
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