Queridos todos y todas:
Hace poco rato regresamos de San Cristóbal las Casas, a donde salimos el lunes por la mañana, en un viaje planeado con anterioridad y regresaríamos hoy miércoles, sabiendo que la Pascua de don Samuel podría ocurrir en cualquier momento, así fue, en el trayecto hacia San Cristóbal recibimos la noticia.Se que muchos de ustedes tendrán muchísima información, sin embargo el compartir este acontecimiento desde la vivencia quizá “complete” tanta información que ya tienen.
Eran las 6 de la tarde, cuando al cruzar el Parque Central de San Cristóbal la gente caminaba hacia la catedral con paso ligero y huipiles de gran colorido, se había informado que su cuerpo llegaría a las 7, pero no iba a ser así, su embalsamiento, había sido muy lento, las horas pasaban la catedral estaba muy llena y “para hacer tiempo” se iba desgranado el tiempo entre algunos cantos y la lectura de las nunca mejor dicho los interminables mensajes de condolencias llegados desde todos los puntos cardinales…
Una, dos, seis horas de espera pero la paciencia del pueblo resistía eso y más… el silencio y la unción que se respiraba en el interior del templo expresaban tantas cosas… la profusión de luces hacían que aquellos blancos muros hablaran con su luminosidad de lo que fue la trayectoria de Jtatik Samuel, el rico artesonado expresaba un poco de lo que fue la gigante riqueza de su existencia que tanta vida proyecto a lo largo de su larga vida. Y el pueblo –indígena en su mayoría- sencillo, orante, ahí el mejor testimonio de su obra….
El anhelaba estar en la planeada celebración del 25 de enero, con motivo de sus 51 años como Obispo, 40 de esos en San Cristóbal, y ¡no faltó….! ¡“llegó puntual…” ¡Al filo de la una de la madrugada el féretro avanzaba por la gran explanada de la Plaza de la Paz frente a catedral, por el camino que con flores y veladores llegaba hasta al presbiterio…. Fuera el caracol hacia resonar en el silencio de la noche su particular sonido. En el interior de la Catedral de la Paz, el silencio era impactante, hasta que fue roto cuando ingresó por la puerta central siendo acogido con un gran aplauso… la emoción llegaba a su climax… La Eucaristía fue bella, de Acción de Gracias, por habernos dado un Profeta, un pastor, un pastor de la esperanza. Al concluir, después de las 2 de la mañana iniciaba un periodo de dos días en las que el pueblo de Dios haría continua presencia para estar cerca de su Padre y Pastor, de aquel que como Jesús, les había abierto los ojos, había roto cadenas, liberado de las esclavitudes…
A lo largo de todo ese tiempo era interminable la fila de personas que hacían cola con flores y veladoras para darle el último adiós a JTatik Samuel, y también las Eucaristías.
A las 12 del mediodía se celebró otra Eucaristía “significativa”, el año pasado a esa misma hora y en el mismo lugar se celebraban los 50 años de JTatik Samuel como Obispo… y la de este año sería la de su 51 aniversario… estuvo presente, pero también en el cielo…. Hubo innumerables testimonios bellos, profundos, para muestra… el Grupo de las Abejas --Acteal- , le expresaba : “si no hubieras venido aquí, seguiríamos viviendo como esclavos, nos enseñaste a luchar por la justicia, tu eres nuestro padre, nuestro abuelo, y cuidador del pueblo oprimido. Hiciste que las mujeres creciéramos. Cuando estés presente con papá y mamá Dios dile que la masacre de Acteal sigue impune”…
Hoy muchos de quienes le atacaron, persiguieron, criticaron, calumniaron, han reconocido la verdad de su persona y su obra, empezando por el gobierno de Chiapas.
La Conferencia Episcopal Mexicana hizo lo suyo reconociendo “su compromiso con los más necesitados, viendo en él a un hombre de Dios, voz clara de la justicia, que no desfalleció en los momentos difíciles sabiendo en quien había puesto su confianza” esto fue en la bellísima Eucaristía Funeral hoy en la gran explanada la Plaza de la Paz, frente a la catedral. Nuestro obispo Felipe Arizmendi expreso cosas muy significativas entre ellas, ratificó lo que ha dicho más, y se ha dicho desde 1975 por don Samuel: que “quien no asuma la opción preferencial por los pobres, no tiene lugar en esta Diócesis”
Mil cosas compartiría, las vivencias, las imágenes, los rostros, lo oído y vivido estos casi 3 días se agolpan en la mente, en cada fibra del cuerpo…. ¡es tanto!... Todo un gran regalo de Dios haber vivido estos días tan importantes y significativos, para la Iglesia universal, en especial para nuestra diócesis, que quiere seguir comprometida en el camino trazado por JTatik Samuel, pero no les quiero cansar mil cosas quedan en el tintero…. ¡Hemos tenido la suerte de conocer un Profeta de nuestro tiempo, tan escasos hoy… y esto es un don y motivo de gratitud!
Un fuerte abrazo con inmenso cariño
Rebeca
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